Toda la actividad académica del evento ha mostrado la gran revolución que está planteando el mundo de hoy en el que nada de la información de los consumidores parece oculto a los ojos y oídos de los promotores del emprendimiento del mundo. En ese sentido, la llamada economía colaborativa se presenta como una alternativa para poder entrar en la dinámica de la competitividad.
Esta forma de hacer negocios en el mundo de hoy facilita actividades mediante plataformas colaborativas que crean un mercado abierto para el uso temporal de mercancías o servicios ofrecidos a menudo por particulares. Allí se enmarca la experiencia de Wework, plataforma que reinventó el concepto de oficinas, como lo expresa su gerente, Karen Scarpetta.
Esta compañía tiene 300.000 miembros en el mundo. Es considerada una de las plataformas más poderosas, con una actividad similar a la de otras grandes como Uber y Airbnb, para mencionar unas cuantas. Su fin no es solo proporcionar los 287 edificios que tienen en 22 países para que el trabajo sea una experiencia distinta, sino proveer una solución integral.
Es así como, una compañía puede hacer una junta en cualquier lugar del mundo sin tener una oficina en ninguna parte o puede usar un espacio laboral en una ciudad en la que tiene todas las oficinas posibles. “Con Wework transformamos la manera en que las empresas trabajan, no solo el día a día, sino que puedan llegar a un punto en común que es Wework y poder trabajar juntos, poder convertir en proveedores o aliados”, dice.
En esta compañía, que tiene 4 mil miembros en Colombia, 3 edificios en Bogotá y Uno en Medellín, mientras que está listo para abrir su sede en Barranquilla, en el primer trimestre del 2019.
Wework parte de la idea de que el 87 por ciento del tiempo las personas pasan en un edificio, lo que los hace crear la oportunidad de que, para gastar ese pedazo de vida, se tengan experiencias variadas, placenteras, que son de trabajo, pero tienen el objetivo de acercar al ser humano a la felicidad que busca hoy en todos los espacios. “El 89 % de los encuestados en una investigación dice que es más feliz en un lugar abierto de trabajo diseñado para que pueda seguir siendo productivo en un lugar distinto a su oficina”, dijo Scarpetta.
Negocios malla
Lisa Gansky, experta en negocios tipo Malla, también puso en la discusión la economía colaborativa, que encuentra su soporte en las facilidades que pone a la mano la tecnología.
Su popuesta apunta a señalar el camino para que las empresas rompan el esquema tradicional de producir o prestar un servicio, para luego venderlo y recibir un pago a cambio. En ese contexto, el esquema puede que continúe, pero el consumidor pasivo quedó atrás. Hoy el comprador o usuario de un servicio tiene a la mano la tecnología que le permite decidir, elegir, vivenciar.
Para llenar sus necesidades se requieren modelos como el de pentacrecimiento, desglosado por Javier Creus, investigador que creó esta fórmula, basada en cinco reglas: capacidad de conectar forma de construir el inventario; empoderamiento de usuarios, capacitación y disponibilidad para compartir el conocimiento.
Creus construyó su modelo basado en la investigación de compañías con amplio crecimiento tras lo cual concluyó que el dinamismo depende de la generación tecnológica que se adopte.
El foro Caribe Biz se extenderá hasta este martes, con participación de expertos nacionales e internacionales que están mostrando que la transformación de los negocios no es un ‘se puede’, sino un ‘se debe’.